Stadium Casablanca es uno de los nombres más conocidos del baloncesto femenino, porque llevan muchos años trabajando en este mundo, pero sobre todo estos últimos años es cuando están recibiendo el premio a su labor. Subieron a la Liga Femenina hace dos temporadas y después de quedar novenas y duodécimas los años anteriores, este año han pasado a pelear por los primeros puestos de la clasificación. Se puede decir que junto a Gernika son el equipo más importante en el segundo escalafón de la liga.
Las de Victor Lapeña están clasificadas en quinto lugar y se puede decir que si hay algún equipo en forma en la liga, ese es el Mann Filter. Han ganado cinco de sus últimos seis partidos disputados, el último de ellos contra Gernika, rival directo, en la prórroga. La verdad es que desde la salida de Britany Miller, el equipo ha ido para arriba. La americana llegaba para ser la referente del juego interior pero no terminó de adaptarse al equipo. Su sustituta ha sido Sheanna Mosch. En principio un cambio un tanto raro, puesto que ha llegado una exterior por una interior, pero les ha salido bien. Por un lado porque la veterana Mosch da buena cuenta de su calidad partido a partido, aportando 11’2 puntos de media. Y por otro porque ahora el equipo puede jugar más alegremente y eso es muy beneficioso para jugadoras como Paola Ferrari.
Sin lugar a dudas la italiana es el motor del equipo. Es la jugadora que más puntos ha anotado en la competición (250) y se puede decir que es casi imparable. Anota casi 18 puntos por partido y también ayuda mucho en el rebote con5’3 de media, aparte de repartir casi 4 asistencias por partido. Junto a ella, la pívot Jaklin Zlatanova y la base Gabi Ocete forman el triángulo mágico.
Con la salida de Miller, Zlatanova, Lo y Liepkalne quedan como únicas interiores del equipo, pero esto le ha venido bien sobre todo a la búlgara, porque sus números han subido como la espuma hasta convertirse en la segunda referencia del equipo: 11’4 puntos, 8 rebotes y 15’9 de valoración. Los números de Gabi Ocete tampoco se quedan atrás: 9’6 puntos, 4’7 asistencias y 11’6 de valoración por partido. Estas son las jugadoras a atar en corto, sin desmerecer el trabajo que pueden hacer jugadoras como Liepkalne, esparcía o Mosch.
Está claro que si Añares ganase daría una de las campanadas más sonadas de la liga, pero hay que tener en cuenta que en el partido de ida en Zaragoza el equipo fue competitivo durante dos cuartos a pesar de perder por 30 puntos; que juega en casa y eso siempre le da un plus al equipo; y sobre todo, después de las últimas dolorosas derrotas, las jugadoras están deseosas de demostrar que éste es más que un equipo acostumbrado a perder.
Para conseguirlo está claro el camino: bajar la cantidad de puntos recibidos. En los últimos 4 partidos Añares ha recibido algo más de 91 puntos de media y bajar esa cantidad es indispensable. Hay que tener en cuenta que Mann Filter es un equipo que ronda los 70 puntos anotados por partido y si se consigue estar en esas cifras las opciones de dar un susto serán más amplias.
Egurre Añares!!