Queda una bala y el Lan Mobel se agarrará a ella con la fuerza de un carácter que ya ha demostrado en muchas ocasiones. El conjunto guipuzcoano la disparará mañana en Ourense (18.00) después de que ayer no pudiera resolver en casa la eliminatoria de cuartos de final del play off de la LEB Plata.
Tras su enorme victoria del martes en tierras gallegas, el conjunto de Iurgi Caminos saltaba a un abarrotado Polideportivo Azpeitia con la opción de dar la sorpresa y eliminar por la vía rápida al gran favorito para acompañar al River Andorra dirección a la LEB Oro. Pero no pudo ser. Los visitantes se impusieron y devolvieron la serie a su pista (59-66).
El Ourense subió el pistón defensivo de la ida. El Lan Mobel recogió el guante, apretó atrás, pero no pudo desplegar el excelente acierto que le hizo firmar 87 puntos el pasado martes.
El contexto del partido cambió y los gallegos tomaron el control con ventajas escasas. Costaba mover el marcador, seguramente fruto de la tensión. Porque el cuadro de Rafa Sanz, un equipo diseñado y sobre todo reforzado con la obligación de conseguir el ascenso, estaba ante su última oportunidad de seguir con vida.
Así, el partido transcurrió con el dominio de las defensas, pero los gallegos encontraron su oasis particular en el tiro exterior. Mientras el Lan Mobel firmó un cinco de veinticinco, el Ourense fue más certero. Anotó nueve triples de los dieciséis que intentó.
Le sirvió para paliar las 29 pérdidas de balón, fruto también de la buena defensa local. En ella, y en el excelente partido en ataque de Alfredo Ott, se apoyaban el conjunto azpeitiarra para aguantar el envite de uno de los grandes.
Recital de Ott
El escolta estadounidense volvió a dar un recital, una exhibición más que demuestra que probablemente sea el jugador más valioso de la competición. En un partido atascado se fue a 26 puntos, con cuatro triples y diez de diecinueve en tiros, ocho rebotes, cinco de ellos en ataque, tres asistencias y veinticinco de valoración.
Así, el encuentro llegó con un bajísimo 24-26 al descanso, tras un inicio con color visitante. El Lan Mobel llegó a colocarse por delante en los minutos finales del tercer cuarto (38-36, min.28), pero el conjunto gallego pegó un tirón que le daría una ventaja clave.
Un parcial 2-13 ponía las cosas cuesta arriba. Ott lideró la reacción con cinco puntos seguidos. A falta de tres minutos y medio, dos tiros libres de Atoyebi acercaron aún más a un equipo que, desde luego, nunca se rinde (53-55).
Pero el acierto de Kyle Hill, que hace pocos años fue el héroe del ascenso a la ACB del Alicante, condenó al Lan Mobel a la lotería de cometer personales. El base Jorge Fernández no perdonó, dejando sin esperanzas al conjunto y la afición guipuzcoana.
Así, el Lan Mobel tendrá que volver a Ourense para quemar su ultimo cartucho. Un largo a una pista donde tratarán de derribar, una vez más, al favorito. El martes lo hicieron. Mañana, seguro, lo intentarán.