- Habéis perdido algunos partidos en las últimas jornadas, pero la temporada está siendo de quitarse el sombrero.
“Está siendo extraordinaria. Creo que hemos hecho una primera vuelta increíble. Y sí, es verdad que últimamente nos está costando algo más, pero también es normal. Las adversarias vienen a ganarnos sí o sí, porque hemos estado durante muchas jornadas sin perder y en lo más alto de la clasificación y eso les hace salir con más motivación si cabe contra nosotras.”
- ¿Quizá, puede ser que también habéis empezado a notar el cansancio dado los problemas que habéis tenido durante la temporada?
“Entrenar con tres, cuatro personas no es fácil. Los resultados nos han demostrado que cuando hemos hecho buenos entrenamientos y con normalidad de gente, hemos terminado ganando. No ir a entrenar y luego realizar las jugadas a la perfección es realmente difícil.”
- De todas formas, probablemente esta será la temporada que más estéis disfrutando, ¿no?
“Quizá sí. Las victorias también te llevan a eso y siempre se disfruta más ganando que perdiendo. También ahora los objetivos son diferentes. En los años que estuvimos con Acosta, jugábamos para mantener la categoría. Ahora, estamos clasificadas en las primeras posiciones y queremos mantener el nivel dado en la primera vuelta. Eso también nos lleva a tener algo de presión, porque cuando perdemos, a pesar de mantenernos arriba, el golpe suele ser mayor.” Hemos empezado a malacostumbrarnos.”
- En tu caso, te está tocando jugar muchos minutos. ¿Demasiados quizá? ¿Está siendo duro?
“No, es mucho más duro no tener minutos. Cuantos más minutos tenga mejor. Yo siempre me tomo los partidos como si fueran una final y en todo momento que estoy en la cancha intento dar lo mejor de mí y estar concentrada al 100%. Creo que así se disfruta más.”
- ¿La clave entonces es esa y que sois una cuadrilla que lleváis jugando junta mucho tiempo?
“La mayoría de las jugadoras nos conocemos muy bien. También nos entendíamos bien con gente que hoy no está en el equipo. Ahora han empezado a subir jugadoras de abajo y necesitamos tiempo para que se amolden al equipo y vamos consiguiéndolo poco a poco.”
- Pero este equipo tiene algo que engancha.
“Sí, es como una droga. Hasta las que han estado fuera del equipo un tiempo han querido volver, y las que hoy por hoy no pueden estar con nosotras están deseando hacerlo. Entre nosotras se ha creado una gran relación de amistad y confianza.”
- ¿Por tanto el camino que os toca hacer ahora es integrar a las jóvenes que vienen de abajo?
“El que las jóvenes hayan venido al equipo le ha dado más velocidad y eso lo hemos comprobado en muchos de los partidos de la primera vuelta. La mayoría de nuestras contrarias son más fuertes que nosotras físicamente y nosotras siendo más jóvenes le hemos dado velocidad a nuestro juego y eso nos ha llevado a sumar victorias. A las que llevamos unos años en el equipo también nos han forzado a este tipo de juego y el querer mantener ese ritmo nos lleva a nosotras también a tener que superarnos día a día. Hay mucha calidad en la cantera y si poco a poco conseguimos integrar a esas jugadoras, tendremos equipo para largo. No es fácil que llegadas a una edad las chicas sigan jugando al baloncesto, pero si conseguimos que las ganas y la pasión por este deporte prevalezcan en las jugadoras, duraremos a este nivel muchos años.”