El comienzo del partido fue muy igualado y con ambos equipos centrados más en la producción ofensiva. Tanto Zaher como Araberri rentabilizaron con rápidas transiciones los errores del rival y la poca concentración defensiva. Sin un claro dominador en el campo, los dos equipos deleitaron a los asistentes con un fluido intercambio de canastas. 19-16 de parcial favorable para los locales.

El segundo cuarto transcurrió por los mismos derroteros que el anterior, poca ambición defensiva por parte de ambos y mucha vocación ofensiva. Los porcentajes de anotación cayeron y los dos equipos tomaron conciencia de la importancia del trabajo defensivo. Zaher se volcó en controlar el rebote y lo consiguió, la mayoría de los puntos obtenidos en este cuarto llegaron en segundas y terceras opciones. Tablas a 14 en el parcial de este segundo cuarto y el partido completamente abierto para alaveses y gipuzkoanos.

Tras el descanso el partido entró en una dinámica oscura y de poco virtuosismo. Los dos equipos apretaron los dientes en defensa y convirtieron los ataques en un problema para el rival. La intensidad en el 1x1 y la defensa de las líneas de pase fue muy buena, lo que provocó una enorme dificultad en la circulación del balón y la incapacidad de los jugadores por conseguir situaciones claras de anotación. 8-10 favorable para Zaher y todo por decidir en el último cuarto.

Araberri pinchó, el desgaste estaba siendo muy fuerte y sufrieron un bajón que Zaher supo aprovechar. Un 0-8 de parcial lanzaba a los nuestros hacia lo que podía ser la segunda victoria (45-51), pero nuestra efectividad nos volvió a jugar una mala pasada. A pesar de tomar buenas decisiones en ataque, la bola no quiso entrar y eso resucitó a Araberri que se volvió a meter en el partido. Los alaveses empataron el partido en el último minuto y metió el miedo en el cuerpo a los de Iraurgi. A falta de 1.6 segundos para el final, con el balón en nuestro poder, Enaitz pidió tiempo muerto y preparó el que sería el último lanzamiento del partido. El movimiento salió a la perfección, el balón llegó a Ieray y el base del Zaher vivió su momento de gloria, ese que todo jugador desea que le pase alguna vez. La metió desde 5 metros y la explosión de alegría del equipo fue tremenda. 10-13 de parcial para los de Azpeitia.

Zaher consiguió llevarse el partido con un buen trabajo defensivo, una faceta en la que venía fallando en la competición. Un paso adelante que sube la moral del equipo hasta el infinito y que seguro les va a permitir rendir a mucho mejor nivel del que estaban dando.

5/14 en tiros libres es un factor que hay que corregir rápidamente. En partidos tan igualados como este……, demasiada ventaja para nuestros rivales.

Zorionak eta egurre Zaher!!!!!!