Cuando iniciamos esta aventura en Liga Femenina tod@s teníamos claro que afrontábamos un reto imposible, que nos metíamos en una aventura con un final escrito, algo lógico cuando sales a competir con nuestra gente (1ª Femenina) y con un presupuesto de LF2. A pesar de ello el equipo ha conseguido dejar su impronta en la categoría y el nombre de Iraurgi está en boca de todo el baloncesto femenino estatal. Añares ha competido con mucha dignidad y ha salido con la cabeza muy alta de todos los pabellones donde ha jugado, espiritualmente hemos sido vencedores en 14 de las 20 derrotas que lleva el equipo.

Todo ello lo hemos hecho sin modificar un ápice nuestra plantilla. El club tenía muy claro que la apuesta inicial la llevaríamos hasta el final con todas las consecuencias y así ha sido. Excepto Campus Promete, todos los equipos han hecho un desembolso importante en modificar y tratar de mejorar sus plantillas para evitar el descenso. Uni Ferrol, por ejemplo, ha cambiado a Hammond y Mills, por Davis y Kelley, quizás el equipo gallego ha sido uno de los más “discretos” en lo que a movimientos se refiere.

Nuestro proyecto deportivo la próxima temporada estará en la categoría que debería haber estado, pero todavía nos quedan dos retos por completar.

Uno de ellos es sumar una victoria y la plantilla tiene claro que lo va a conseguir, sería injusto que este enorme esfuerzo que tod@s hemos hecho se quede sin ese pequeño premio. Sería injusto que el casillero de victorias acabe a cero, nuestras chicas se lo merecen.

Otro reto le corresponde cumplirlo a nuestra fiel afición y el polideportivo de Azpeitia tiene que seguir siendo un hervidero de aficionados entregados a nuestras chicas. Siempre lo han hecho y no lo van a dejar de hacer hasta final de temporada. Una afición incansable que se ha caracterizado por el respeto hacia nuestros rivales, un claro ejemplo de lo que deberían ser todas las aficiones. Ahora que matemáticamente estamos descendidos es cuando más apoyo tiene que recibir Añares desde la grada, no es el momento de quedarse en casa, es el momento de seguir llenando el pabellón.

Ya nos da igual el rival, sus plantillas, su calidad, su posición en la tabla……….., ahora se trata de dar el 200% en cada compromiso y tratar de conseguir ese ansiado objetivo. Cada partido va a ser una batalla en la que no vamos a hacer prisioneros. Añares va a entregarse cada segundo de competición que le queda, lo va a pelear como si no hubiera mañana porque……, no hay mañana en Liga Femenina!!!!!!. Nos podemos permitir el lujo de arriesgar hasta el infinito en todas las facetas del juego, la presión es algo de lo que nos hemos desembarazado y esa situación nos favorece mentalmente.

Este miércoles nos da igual que jueguen Laura Quevedo, Ana Suarez, Chelsea Davis, Beatriz Sánchez………, nos va a dar igual su currículo y su capacidad de anotar, rebotear, defender…., nos va a dar igual que el arbitraje sea bueno o malo……, nos va a dar igual todo porque sólo va a existir una cosa en la mente del equipo: GANAR SÍ O SÍ.

Joseba afrontará el reto con la baja de nuestra capitana. Intza Lizarazu no ha terminado de recuperarse de las molestias en su tobillo y salvo milagro divino (que no suele suceder por desgracia) no participará en el encuentro. Una pena para Intza que contra Ferrol hizo uno de los mejores partidos de la temporada.

Egurre Añares!!!!